jueves, 23 de marzo de 2017

Abrigo

yo siempre voy andando
caminando
con pasos pequeños y
la cabeza gacha,

mirando de reojo
conversaciones

enredando mi pelo
con mis pestañeos

con las manos en los bolsillos
y encogido el corazón
escondido
tras un abrigo que parece
hacerme invisible

y un día,
el aire tiró mi capucha
y me descubrí a mí misma

justo en el momento
en el que el temblor me hacía
volver a esconderme
apareciste

y me miraste,
y no sé qué significará
que se te pare todo alrededor
pero seguro
que tiene algo que ver
con ese momento

en el que me descosiste
los miedos
y me pusiste una sonrisa
que combinaba
con tus labios.

miércoles, 15 de marzo de 2017

Candado a una llave

Van y vienen. Perdón,
vienen
y
se van.

Me pregunto por qué.

Es fácil cometer errores y, son
necesarios para aprender,
pero resulta- llámame rara-
que yo sé equivocarme sin hacer daño
a los demás. Tengo

subidas, y bajadas, y caídas,
y hay veces que corro, y otras
que parece que todo es cuesta arriba.
Pero no hago
que los demás estén abajo para sentirme yo superior.

Y te quedaste, pero te fuiste. Tú,
y él, y ella,
vosotros.
Sacan lo que quieren, lo que
les apetece de ti
y escapan. Y todos igual.
Y todos así.

Y no voy a dar más de mí,
abrir puertas a desconocidos
que me impiden el paso

que yo ya no cierro puertas,
que son ellos mismos los que se encierran,
ahora prefiero quedarme fuera y poner
un candado a llaves
que no me llevan a ningún lugar.

sábado, 11 de marzo de 2017

0:20

se me hace imposible
ver empañados mis ojos y no
intentar dibujar nuestras iniciales en ellos.

miércoles, 8 de marzo de 2017

Diario

hojas sin fecha
mi reloj en el recuerdo de ayer

se ha parado el tiempo
por unos instantes
y, a la vez, ha acelerado

una sonrisa
ha cubierto un rostro
y la ciudad ha quedado a oscuras
tan sólo
alumbrada
por una mirada

la tuya, en mis ojos, reflejada

dos desconocidos,
que saben exactamente cómo
encajan sus manos

y que llevan escritas
más de mil historias
       invisibles
en su piel

no me digas que hace tiempo
que no nos vemos

porque ya hemos sonado antes
en esta canción
a la que llamamos olvido
y sabe a miedo, a salida, llegada

ahora dime qué hago con tantas letras
que no dicen nada sobre mí
si no comienzan con tu nombre
si no terminan
pronunciándose

en mis labios.