miércoles, 12 de enero de 2022

Subrayado en tu página

Y yo no avanzo.

Y tú sigues ahí en alguna parte de la ciudad, a veinte pasos de mi casa, en la frase subrayada de la página 110, en la ramita que cogimos junto al mar, sigues en alguna parte en la que ya no estamos.

Y yo no avanzo.

Y entonces veo que sigues. Que sigues por tu parte. Y que yo voy por la mia. Dos orillas que nunca se van a besar. Y entonces estás lejos, construyendo nuevas cosas, nuevas relaciones y experiencias. Yo escribo en la arena que tuvimos que decirnos que no, porque era lo mejor. No era lo que queríamos, sino lo que teníamos que hacer. No quiero desde ti. ¿Cómo pudo suceder todo tan rápido? ¿Cómo hemos permitido construir nuevas cosas en tan poco? Es injusto para los que fuimos. Entonces tú sigues construyendo rascacielos, mientras yo me siento en la hierba y veo que son mejores que el desastre que quedó aquí. Dejando que todo pase cuando quiera. Observo que es más bonito, que es mejor, que es tu presente.
Un huracán derriba las fotografías, lo que yo trataba de construir, a nosotros.

Y yo no avanzo en nada.
Así mi orilla no existe, la tuya no me llama
y solo quedan en el mar
partes de mí a la deriva.

No hay comentarios:

Publicar un comentario